La fórmula para medir el desempleo, indica que si una persona entra al narco, roba o pide limosnas en la calle ya no cuenta como desempleada, porque no está activa en el mercado laboral.
Redacción | redaccion@cronica.cr
Hay algo extraño en la encuesta continua de empleo. La tasa de desempleo bajó drásticamente, para ser precisos un 3,6%, pero la cantidad de personas trabajando no, esa es "relativamente la misma" según el estudio.
Entonces, ahora tenemos una tasa de desempleo envidiable a nivel mundial de apenas un 9.7% pero la gente sigue sin encontrar trabajo.
Para entenderlo hay miles de formas técnicas que los economistas usan y cada uno a su forma o conveniencia. Por ejemplo, el Gobierno celebra por lo alto la disminución en la tasa, pero los políticos adversarios critican que no hay generación de empleo. Al final, ambos buscan votos y se olvidan de los que no consiguen llevar el sustento a la casa.
En la investigación de Cronica.cr, el diario de la gente, nos dedicamos a determinar qué variables hicieron que la tasa de desempleo bajara.
Resulta que, por ejemplo, si el hijo de "la señora de Purral" se cansa de no encontrar trabajo y se mete a vender drogas, ya para el INEC esa persona no está desempleada.
Tampoco lo están las personas que no buscan trabajo y en su lugar roban carros, asaltan y cometen otros crímenes.
Lo que piden limosnas en la calle porque no encuentran trabajo, tampoco están desempleadas según el INEC, porque ya están recibiendo ingresos, así sea a punta de moneditas de ¢100 en un semáforo.
El Coordinador de la Encuesta Continua de Empleo del INEC, Braulio Villegas, explicó que estas personas no pueden considerarse desempleadas porque ya no están dentro de la fuerza laboral.
Es decir, por ilógico que parezca, entre más personas se cansen de buscar trabajo y se dediquen a algo "propio" así sea que generen apenas ¢10 mil colones a la semana, o bien, entren al mundo de la delincuencia, así mismo la tasa de desempleo va a bajar.
Para el informe de este trimestre, el INEC asegura que no hubo generación de nuevos empleos y por ende no hay más personas ocupadas, pero la tasa de desempleo bajó porque las personas se salieron del mercado laboral.
Ahora la preocupación es: ¿A dónde están esas personas y qué están haciendo para llevar comida a sus casas? En una segunda entrega le contaremos.
